Via POUSTA – Por Isidora Cuadra Koch
Esta entrevista a la activista ambiental Julieta Martinez (16) está divida en dos partes. La primera parte, se hizo pre estallido social y pre Cop 25, donde la joven se hizo presenta como creadora de la plataforma «tremendas» con este discurso.
Sobre su participación en el encuentro realizado en España nos dijo:
La COP me entregó experiencias y aprendizajes. Tuve la oportunidad de estar en paneles y en mesas de discusión con científicos que expusieron años de investigaciones, documentos, cifras concretas que demuestran que la ciencia tiene que liderar la Conferencia de las Partes, no negociadores ambientales que están preocupados de la economía competitiva del país más que la ciudadanía, el entorno y todos los seres vivos que habitan en él. También conocí activistas medioambientales de todo el mundo, cómo Greta, que expresaban su descontento a través de intervenciones, manifestaciones pacíficas y mesas de opinión. El mensaje que entregaban era similar en que aunque existan 120 países que entreguen NDC (contribución nacionalmente determinada) más ambiciosas, dentro de esos 120 países siguen sin estar los grandes emisores como Estados Unidos, Rusia, China e India, países que no están ayudando a llegar a acuerdos. Por eso la Cop terminó sin un artículo 6 más ambicioso (Gestión de carbono) y el avance fue mínimo. Pero igual agradezco la oportunidad de haber conocido a jóvenes que están dando la cara por su planeta y a través de sus acciones y mensaje le están dando esperanza al mundo. Gente sufre y muere todos los días, el «tiempo de actuar» es ahora.
Respecto al estallido social que empezó en octubre, opina que:
Respecto a la crisis social que vive Chile, me parece profunda, pero necesaria desde la mirada de romper el sistema de distribución de riqueza tan desigual. No es posible tal burbuja del súper desarrollo a un par de kilómetros de campamentos, de dolores varios por la desigualdad que es real y brutal y donde todos debemos ver en que cuota somos responsables. Yo también me enojo y exijo cambios, pero el primer cambio parte por mi y las renuncias, cambios y acciones que debe emprender para que lo que no me gusta cambie. Me preocupa la polarización, la violencia, la represión. Yo quiero transformar mi rabia, mi pena en acciones con otros para empujar hacia la equidad, pero soy consciente que no me ha tocado en la vida campamentos, ni Sename, no cola de hospital y eso me hace sentir culpa sin tenerla, me hace pensar en la rabia del otro, pero creo que el camino no es la violencia, sino la generación de procesos de cambios reales y una Constitución que se haga cargo de estos dolores y que dignifique a su pueblo y su gente.
Ahora la entrevista original, donde nos contó su historia.
Cuando llegué a la entrevista con Julieta me sorprendí estaba siendo la moderadora de un foro de negocios con impacto ambiental. La tuve que esperar un rato porque el foro aún no terminaba y por mientras hable un rato con su mamá que me contaba que la había ido a buscar al colegio temprano para poder llevarla hasta allá.
Cuando terminó el foro, Julieta bajó del escenario y todos los emprendedores se le acercaban para mostrarle sus proyectos o para hacerle preguntas. Era la estrella del lugar y solo tiene 16 años.
¿Qué hace la plataforma tremendas?
Tremendas es una plataforma que visibiliza y conecta el talento con sentido. Buscamos que las jóvenes se empoderen, que se desafíen a si mismas, que finalmente no se pongan límites, que se den cuenta que están solo en la cabeza, que superen la barrera del miedo y dejen fluir su creatividad, su imaginación y que vean que las ideas de sus proyectos son posibles y que pueden cambiar el mundo, que sean talentos vinculados a una causa social porque es un talento con sentido, talento con propósito. Finalmente, que se hagan la pregunta de ¿cómo puedo impactar positivamente la sociedad en la que vivo a través de mis capacidades en el mundo de la ciencia, de las artes, de la tecnología y mucho, mucho más?
¿Cómo fue que llegaste a tener la idea de hacer la plataforma?
Cuando tenía 10 años fui a una marcha en donde se pedía que la bomba insulina llegara al auge, puesto que yo soy diabética insulino dependiente desde que soy bien chiquitita, como 3 años y 10 meses. En ese momento de la marcha yo tenía la bomba, porque tengo la suerte de que mis papás pudieron comprarla, la que en un momento fue súper cara, pero entonces entró a mi cabeza la pregunta de ¿Por qué yo puedo tenerla y otra gente no? ¿Tengo más derechos? Lo dudo, no puede ser y esto es una injusticia tremenda que no debería estar pasando. Entonces, la sensación de ir a la marcha, de estar junto a muchísima gente queriendo generar un cambio positivo me hizo finalmente querer que todos tuviéramos las mismas posibilidades.
Ahí me di cuenta del poder que tiene la presencia, el poder que tiene tu voz para poder lograr tu objetivo, entonces quise seguir buscando, buscar esas ganas de emprender. En ese momento no tenía muy claro que era emprender, así que seguí buscando, mi mamá me empezó a llevar a eventos de innovación social como el Fiis, escuche a gente increíble como Arturo Soto, que es un emprendedor tremendo, que me mostró que en el camino van a haber obstáculos, que van a haber problemas, pero hay que seguir avanzando y eso es finalmente las ganas de mostrarle al mundo de que hay capacidades, hay ganas, hay talentos, por lo que finalmente la edad no tiene que limitarte a hacer lo que quieres, tus sueños.
¿Por qué crees que tu generación ha tomado el tema con más responsabilidad que las otras generaciones?
Porque la generación Z es la que va a sufrir realmente los cambios, finalmente va a ser nuestra generación, nuestros hijos y nuestros nietos los que van a sentir realmente los cambios. Además, esta generación creció con internet en mano, entonces tuvo la posibilidad de encontrarse y conectar en base a distintos medios, con más información y empezó a enterarse del tema.
Es una generación totalmente empoderada, que se dio cuenta que las generaciones anteriores ya dejaron la embarrada grande y es el momento de nosotros de tomar acción, que algunos, la mayoría, no pueden votar, pero tiene una voz súper potente, porque sí, el joven tiene el deber de actuar, también tenemos el derecho a cuestionar, a preguntar, a informarnos y saber cómo podemos hacer este cambio.
¿Crees que las anteriores generaciones no toman la importancia del tema?
Es complicado, porque por un lado, hay un 66%, no estoy segura si en este momento es ese número, creo que es del 2015-2016, finalmente es un número alto que no cree en el cambio climático. Hay cabezas del mundo que no creen y que probablemente se vayan a la tumba sin creer. Esta demostrado que fue una etapa difícil, desde la revolución industrial, el mundo, la humanidad marcó lo bueno, lo malo y no hay un punto intermedio, o sea yo decidía y yo actuaba según como la sociedad me lo imponía, entonces finalmente se basaron en una metodología, en una rutina que nos hizo dependientes de las emisiones, se hizo dependiente a todo aquello que no está matando lentamente, porque la Tierra va a seguir existiendo, lo que va a desaparecer es la raza humana.
¿Cómo te tomas la comparación con Greta Thunberg?
Que me comparen con Greta yo lo encuentro primero que todo un honor, porque la encuentro realmente potente. Greta es un modelo a seguir, si lo explico con palabras simples lo que siento es que una Greta faltaba en el mundo, faltaba una voz que les hiciera prender la ampolleta y les dijera realmente estamos en un problema, nos pasamos año tras año con un discurso muy positivo de que todos podemos hacer un cambio y nadie hizo nada y por más claro que queda el mensaje, nadie se dispuso a hacer nada. Entonces llegamos a un momento de crisis, un momento en que realmente los cambios los estamos viendo día tras día y es muchísima gente afectada y ecosistemas enteros están colapsando, así que ya no hay espacio para decir que no existe o no hay espacio para no hacer nada. No podemos seguir quedándonos en zona de confort, en una burbuja esperando que unos pocos se hagan cargo del problema de todos.
Entonces, yo no me considero la Greta chilena, pero si considero que quiero seguir finalmente con el ideal que tiene Greta, el ideal de cambiar el mundo y demostrar que todos podemos ser parte del acto, todos podemos ser parte de la acción, el tema es decidirnos y actuar de inmediato.
En tremendas hay muchísimas niñas desde Arica a Punta Arenas que decidieron hacer el cambio, existen muchas Gretas en el mundo, como Gretas existen Ignacias, existen Marías y existen Julietas, muchísimas niñas están, tal vez no solo en acción climática, están en todos los campos, pero que finalmente se decidieron a través de su experiencia, a través de su conocimiento, de sus capacidades, cambiar la sociedad en la que viven. Entonces, Gretas están en todos lados, el tema es escucharlas, darles la oportunidades y darles su espacio ciudadano para contar que decidieron ser parte del cambio.
¿Qué cambios quieres que haya en un futuro cercano respecto a la responsabilidad medioambiental? ¿Cuáles crees que son más urgentes?
Lo más urgente, primero que todo, que se tome como una crisis, de verdad, o sea los científicos dijeron que esto ya no es cambio climático, esto es crisis climática y tomémosla como una crisis como tal.
Algo que es muy urgente y que yo veo como urgente es el tema de educación medioambiental, porque el tema es que tenemos que empezar a entender sobre el tema desde pequeños, o sea exterminar el problema de raíz.
Finalmente, esto es un tema que he mencionado más de una vez, que si existe una operación deyse en caso de terremoto ¿dónde está nuestra operación deyse en caso de crisis climática?